Desde el jueves, los días son más tristes. Nos duele el corazón. El colegio entero llora la pérdida de nuestra querida compañera y amiga, MARÍA, que nos ha dejado demasiado pronto. María era alegría, entrega y ternura, una maestra que iluminaba cada día las aulas de Infantil y llenaba de cariño la vida de nuestros niños y de todos los que tuvimos la suerte de conocerla.
Su partida nos deja un vacío inmenso, pero también el recuerdo imborrable de su sonrisa y de su forma única de querer y enseñar. Nos unimos como familia en este dolor tan grande y acompañamos a sus padres, Juanjo y Pilar, y a su hermano Pablo con todo nuestro cariño y nuestras oraciones.
Las personas buenas tienen un sitio especial ahí arriba. Estamos seguros de que tú lo tienes, María. Siempre estarás en nuestros corazones. Rezamos por ti.

